A nadie se le escapa que Fidel Castro era un gran amante de los puros cubanos, en concreto empleaba la mas sabrosa y refinada de las marcas de la isla, Cohiba, que fué fundada en 1966.
No solo fumaba los puros Cohiba Espléndidos, también bien los empleaba como presente, como regalo preferido a las personalidades a las que recibía o iba a visitar, como jefaturas de estado, embajadores o ministerios extranjeros que visitaban la isla.
Es común encontrar puros, que aun siendo de buena calidad, están etiquetados como Cohiba pero realmente no lo son.
Frecuentemente son turistas las victimas de esta picaresca isleña, pagando dos, tres o cuatro veces mas por una caja de puros, pensando que son los Cohiba auténticos que acompañaron a Fídel Castro en la revolución cubana, en la transformación socialista de la isla.